Te diría que nunca se me
ocurrió ser escritora. Escribir para mí siempre fue un acto de libertad, de
compañía –aunque
se realiza en soledad- El lápiz y el papel, la máquina de
escribir, luego la computadora; juntos, éramos y somos, un grupo de rebeldía y
libertad.
Mi tarjeta de
presentación dice: “Andando caminos entre números y palabras”
Creo que luego de la
gestación, llegamos al mundo por la maravillosa regularidad del número, nueve
meses, no más, en pocos casos algunos meses menos. Ese es mi caso; siete
mesina. En algún lugar escribí: “Nací apurada para tomar el nombre
que ya habían elegido mis padres para nombrarme. No fue por seguir al
conejo, aunque me hubiera gustado conocerlo…”
El Universo, la
Naturaleza, todo reglado por el número… y es la palabra que lo interpela, lo
sacude, lo delata y lo demuestra. Dos lenguajes que se entrelazan, para
discernir el valor de la palabra. El número es parte de algunos de mis
escritos. Aunque no lo fue cuando era niña y necesité de las palabras para
enredarlas en las historias de mis artesanales títeres. Ahí comenzó mi
escritura imaginaria; crear un cuerpo para dar lugar a las palabras en
movimiento. Siempre tuve necesidad de escribir: poemas, cuentos, letras de
canciones, guión, teatro…según la época y mis actividades. Hoy me dedico a la
escritura!!!
A veces para presentarme
digo, o escribo: “Docente que lee y escribe” al menos en mis actividades en LIJ.
En mis escritos para adultos, soy yo, pero con otra mirada.
¿SE PUEDE DECIDIR SER ESCRITOR, O SE NACE?
No
podría responder con seguridad, creo que todos tenemos cierta habilidad que nos
distingue. Seguramente yo no podría cantar, tampoco ser artista
plástica, sé que aunque lo ejercitara no lo lograría. Desde chica necesité
crear algo para sentir que mi juego se realizaba.
¿CUÁNDO ESCRIBÍS, DEJAS VOLAR SIEMPRE TU IMAGINACIÓN O MIRAS LA
REALIDAD?
Dejo volar la
imaginación, luego que fue atrapada por algo que perturba; un objeto, un
niño, una persona, o algún hecho de la realidad. Quiero decir que en
mi caso ambas se encuentran en el preciso momento de ocasionar el destello y
provocar ese instante; una pintura, una imagen visual que buscará
las palabras para encontrarse con la escritura.
Felisberto Hernández lo
dijo en su original manera: “…como el viento me
tomó desprevenido y dio casualidad que se produjo el hecho de volarse mi
sombrero cuando pensaba en aquel gorro, mi espíritu ensombrecido aprovechó a volar en
el misterio…”
Ese misterio, ese
instante que se cruza y provoca nuevas palabras para contar. Hay que detenerse
y seguir su juego. Aunque hay momentos que se los lleva el viento.
¿DE
QUÉ TRABAJABAS ANTES DE SER ESCRITORA?
Soy Docente, he
trabajado como maestra de primaria y profesora de secundaria en el área de
Matemática, esta última actividad, aún continúo realizando.
¿CUÁL FUE
EL LIBRO QUÉ MÁS TE GUSTÓ ESCRIBIR?
Ante esta pregunta, yo
pienso en los personajes que han armado mis historias…algunos están en libros
editados, o en obra de teatro representada, además de cuentos que van siendo
contados y que aun caminan sin formato.
No podría elegir, todos
surgieron de un momento sensible y significativo. . No podría
decirte qué idea me gustó más para escribir, por momentos, uno tiene muchas,
pero cuando esa idea es realidad, y llega a ser; comienzo, desarrollo y casi
final de una historia, y digo casi final, porque siempre me cuesta dejarla,
generalmente aunque el lector no se dé cuenta tiene tres finales, o final
abierto. Cuesta dejar los personajes, aunque luego ellos toman vida propia en
sus lectores, o actores.
Podría contar varias
anécdotas al respecto.
SE
HABLA MUCHO DE LA LECTURA Y LA ESCUELA, ¿CÓMO ES LA RELACION DENTRO DE LA
ESCUELA?
¿CÓMO TE GUSTARÍA QUE FUERA LA ESCUELA DE
HOY PARA LOS NIÑOS?.
Bueno esta pregunta es
muy sensible para mí! Yo me sigo emocionando cuando atravieso las puertas de
una escuela o una biblioteca, lugares amorosos y muy queridos. Hoy
principalmente llevando mi libro y mis cuentos. Lo principal de todo es la
mirada, el encuentro con ellos, quienes esperan de nosotros que llevemos las
mejores palabras para su imaginación, que les contemos, que los
escuchemos, que integremos ese momento único en el que ellos quizá transformen
nuestro escrito. Recuerdo que hace poco tiempo fui invitada a una
escuela pública de Vicente López, leí mi cuento “Armemos el nombre
claro” En el camino pensé, que algo me faltaba para que ellos también sean
protagonistas, pedí parar al auto que me llevaba, en una
juguetería, lugar que conocen mis gustos, me llevé una cajita que guardaba el
mundo… letras que se amontonaban para ser palabras. Perfecto! Todo se acomodaba
para el encuentro!
Escucharon,
participaron, nos aplaudimos .Luego de armar el nombre que pedía el cuento, yo
les pedí que armaran su nombre, con las letras que ya se habían desparramado en
el escritorio. El tiempo corría y algunos no llegaron a armar su nombre, pero
mientras se iban y me saludaban, con alegría me decían el suyo. Al final pensé
que resulto un cuento de identidad, de la identidad de ellos. Cada encuentro de
lectura es una nueva y significativa historia.
Hay mucha y linda gente que
se mueve para que el libro y sus escritores lleguemos a comunicarnos
con quienes tienen que ser el objeto de nuestra mirada amorosa; el
niño, el adolescente, el principal protagonista, de toda educación. Nos
convocan los directivos de escuelas, docentes, y muy especialmente promotores
de lecturas y bibliotecarias. También madres que al conocernos nos proponen en
los colegios de sus hijos.
¿Cómo me
gustaría que fuera la escuela de hoy para los niños?
¡Tanto para decir…!
Quizá lo sintetizo en un pequeño tramo de un cuento que escribí, recordando
aquella niña curiosa e inquieta, que se sentía analfabeta, al no
tener aún la edad escolar. Lo dedique a mi Escuela Primaria N° 22 de
San Fernando y se llama: “UNA MUERTE PASAJERA”
Parecía un hospital, una
iglesia, un castillo que enfrentaba las vías del ferrocarril Mitre, y desafiaba
con puertas y ventanas abiertas… Desde lejos, se veía su mano de Bandera, en un
vaivén de cielo, nube y sol, llamando a todo niño… para que entrara a jugar, a
saber… ¡A intentar aprender!”
“… Expectante… yo, iba
a recibir la medicación de sus regalos…”
Para que no se pierdan
“esos regalos” que durarán toda la vida, tienen que ser comprometidamente
entregados.
La escuela
siempre enfrentó desafíos, aunque creo que hoy más que nunca.
El tejido social se ha deteriorado, esto perjudica toda la comunidad educativa
Los cambios tecnológicos alteran
el proceso, ese desafío hay que aceptarlo, y seleccionadamente incorporarlo,
para ello hay que promover la capación de quienes
comparten el “acto educativo” Nada es estanco, todo se transforma.
El libro es un recurso
material indiscutiblemente necesario en las escuelas. El libro en
las manos del niño, es un poder mágico que abre todos los mundos y enriquece la
vida de quien los lee.
¿Para qué sirve leer?
Se cuestiona la escritora y
crítica periodística Silvia Hopenhayn
“…El vértigo de no
saber lo que se está a punto de comprender: ´ésa es la gracia de la lectura.
Aquel borde del entendimiento, un atisbo de la belleza del mundo…”
También
la antropóloga Michele Petit, sobre el mismo tema, nos dice:
“…leer sirve quizá
ante todo para elaborar sentido, dar forma a la propia experiencia, o a su
parte de sombra, o a su verdad interior, secreta… Para abrir un camino hacia
los territorios de la fantasía sin los cuales no hay pensamiento, no hay
creatividad.”
Ese vértigo, el borde del
entendimiento…la verdad interior, el camino de la fantasía, necesarios para que
se instalen en el pensamiento y la creatividad.
Hacer disfrutar la
lectura nos compromete ampliamente y también nos enriquece.
Sera el libro papel, o
el digital, yo apuesto al papel…
¿Qué se ofrece, que
ofrecemos? Siempre
quise que la escuela esté centrada en el niño o adolescente, ellos, los
educandos. Que sean recibidos con las mejores y cómodas instalaciones, no
quiere decir que sea oneroso, pero si pensado para su mejor estar,
con aulas dedicadas a las materias, con la tecnología necesaria, para que el
tiempo sea distribuido mejor en el hacer y pensar. Por supuesto la Biblioteca
el mejor lugar, y pequeñas bibliotecas en los espacios recreativos para leer y
debatir. Libros e instrumentos musicales recorriendo sus recorridos, estos
últimos con los límites y espacios acordes al sonido y al silencio.
Las Artes en sus vastas expresiones,
para que atraviesen todas las áreas. Esto puedo afirmar que se puede. El teatro
es una gran herramienta, que aúna vínculos, aporta a la buena lectura, la
dicción y promueve las inteligencias múltiples. Siempre se necesita, en la
puesta de escena, un músico un escenógrafo, un dibujante, tantas cosas más
ligadas a lo social y cognitivo. Experiencias inolvidables. Para ello siempre
escribía pequeñas obras que luego se perdían porque eran para determinado
proyecto, hasta que llego una que pensamos en serio, aunque siempre quisimos
hacer teatro como en un teatro. Pero esta era singular; una familia
matemática… ¿A quién se le ocurrió? A la profe de Matemática que tanto cree en
el teatro, los vínculos, y en este caso también en los contenidos que
desparramaban los comediantes personajes de “La Familia Numerales” Gran
disfrute de quienes la interpretaron, y también de quienes nos acompañaron como
espectadores en las distintas representaciones¡ Mucho para contar! se realizó
por diferentes grupos, de primaria, secundaria y en una escuela de matemática
con alumnos participantes de la Olimpíada de Matemática de quinto primaria a
segundo año de secundaria. Nadie se olvido la letra, siempre tomados por su
personaje, todo fue mágico!!! Hoy esta obra junto a un posible libro
de cuentos están en una editorial. Espero poder contarles que los personajes
salen a la calle y yo los acompaño a las escuelas!
La matemática también
tiene que ver con una transmisión de cultura. Se tiene que tratar de que los
alumnos entren en el juego matemático. Entre varios ejemplos podría señalar
El proyecto de “Teselado”
con figuras planas, verificando el posible encastre de ángulos, y llegar en la
demostración a lograr originales figuras, cuadros en dos
dimensiones, que asemejaba al arte. En otra oportunidad, fue en tres
dimensiones: adosar distintos cuerpos regulares e irregulares, según sus bases
y lograr en ambos proyectos, creatividad plástica. La matemática siempre
presente.
¡Los alumnos siempre
superaban el proyecto pensado!
El
docente tiene que ser un sincero “provocador” de actitudes que lo muestren al
alumno y lo entusiasmen a ir juntos a encontrarse con el conocimiento a
aprender.
El placer de leer,
difícilmente se pueda trasmitir si antes no fue sentido por el educador que
intenta provocarlo.
¿Qué ofrecemos a la
educación? La pasión y el compromiso, parte necesaria del maestro,
del profesor, del educador.
Finalmente ¿Cómo
me gustaría que fuera la escuela de hoy para los niños? La escuela de
hoy, con tantos y sugerentes desafíos, me gustaría que el educador, responsable
ofrezca de tal modo los contenidos, que el alumno lo sorprenda por su interés
.
¿Sos tan sensible como tus
personajes?
Son
ellos, los personajes, que me delatan. “Jaque mate caballero al
rescate” es una historia especial ese pequeño caballero
sale a los caminos tratando de imitar a nuestro admirado Hidalgo,
aunque a pesar de los malos entendidos, no será burlado, como aquel qué
tanto nos dijo en su derrotero universal, este será
ayudado en su pequeña aventura. Digo especial, porque nació como un relato
oral, y los personajes llevan los nombres de mis nietos hasta ese momento,
menos Elisa o Hechita, dos personajes femeninos, junto con la abuela, que
necesite para engarzar la historia. También Problemático nació singular y
sensible y mucho más cuando fue representado. Todos tienen un porqué
de ser así. Creo que todos los personajes de todo escritor, son sensibles en la
acción, porque fueron creados.
¿Qué te hizo ser así?
Soy, o qúe, o quien, me
hizo ser así? Algo decidió quedarse en la memoria de todos los sentidos, para
dejar huellas y empujarnos a seguir andando nuestro camino, algunas no se
borran, se profundizan.
La familia y esas
profundidades en el tiempo. Mis padres, mis maestras, mis vecinas, alguna en mi
adolescencia me conseguía libros para que leyera, otra española
próxima a mi casa, a quien yo visitaba, en época de mi escuela primaria. Ella
Luisa; cierto día descolgó de su pared dos grabados, porque yo reconocí que
eran figuras de mi amado “Don Quijote de la Mancha” Me regaló ambos grabados. A
esa edad, yo no lo había leído totalmente, pero algo de el había llegado a mí.
Quiero decirles que yo misma dudaría de esta historia, si no fuera que nunca se
separaron de mí y que ahora algo vetustos, por el recorrido de no muchas
paredes, están ahí cuidados, y los observo mientras escribo esta nota.
Mis padres: toda la
sensibilidad estaba en mi madre: dadora de amor, solidaria. ¡Tanto, tanto
más! A mi padre hoy, lo veo como personajes mezclados de Bradbury,
El hombre ilustrado por fuera con el valor del trabajo, y que
escondido llevaba la lectura de libros que yo no recuerdo ver, pero que él
comentaba, quizá la música y estos relatos, eran parte de los distintos
viajes que realizaba como niño de padres inmigrantes y de hermanos europeos y
argentinos. Recuerdo sabrosas anécdotas, de estos largos viajes por el mar.
Curiosidades de este
hombre serio con improntas de chispazos de humor.
La familia recuerda,
cuando sus habilidosas manos, nos entretenían con las figuras de sombras que
proyectaban en la pared. También cuando en alguna reunión familiar, sorprendía
a los niños, con el salto del conejo que el armaba con los nudos en una servilleta,
lo hacía como nadie, y nos sorprendía siempre.
Hace poco tiempo leí que
“el padre de Alicia”, la Alicia de un país de su ficción, también entretenía a
sus pequeñas amigas haciendo nudos en un pañuelo. Lo curioso es que él, Carrol
lo llamaba “el salto del ratón” y mi padre “el salto del conejo”
Uno de mis cuentos,
habla del lugar de encuentros con la familia materna, diría que es un relato
casi no ficcional y de ´posible futuro… se llama: “Vengo a quedarme”
“Apresuro
el camino para volver a verlos (…)
Tantos
recuerdos amados de mis mejores años (…)
Casona
del Centenario, Ayacucho y las vías,
Allí
invente una biblioteca, con las historias que pasaban en la casa.
La
dinastía mostraba y escondía, los años y la vida escribían.
Estaba
la Comedia, el Drama; enredos de trama complicada…
Abuela.
Y
los cuentos de los cuentos… que quería escribir cuando leía.
La
biblioteca se hacía casi librería
Cuando
nos reuníamos todos y celebrábamos.
Y por ello vengo a
celebrar (…)”
¿Cómo ves
la literatura infantil y juvenil en Argentina y Latinoamérica?
Creo
que toda Latinoamérica vive situaciones similares en lo político y social que
dificultan las industrias, la industria editorial también pasa por lo mismo. En
nuestro país, una importante editorial emigró y otras se fusionaron. Hay
editoriales independientes que se mueven con creatividad. Pero no es fácil
acceder a la edición en general. Hoy me emociona, y a todos, saber
que vuelve renovado el Plan Nacional de Lectura. Gran estímulo y esperanza para
todos los actores de esta empresa. Principalmente para que el libro sea más
accesible a las manos del niño y del adolescente y a todos los establecimientos
educativos.
Siempre destacamos la
gran labor de los mediadores de lectura, y hacemos un llamado a las editoriales
para que sus puertas sean más abiertas, para recibir nuevos escritos y su
posibilidad de edición. Hay ávidos lectores esperando.
¿Sí un niño o
niña quiere ser escritor, ¿qué tiene que hacer?
Qué lindo encontrar a
una niña o niño que quieran inventar historias! Leer, siempre leer, observar a
su alrededor, principalmente los secretos de la naturaleza, ser curiosos
investigadores. Cuando aparece una historia escribirla, que no se la lleve el
viento…Leerla, corregirla, y seguir escribiendo, escribir es un juego de gran
libertad, y como el libro, nos puede acompañar a todos lados y
sorprendernos. ¡Que
no los sorprenda el viento!!!
¿ Crees
que la literatura debe ser estremecedora, conmovedora, molesta o indomable?.
¿Por qué?
Para Nabokov:
“El arte no es sin juego” En ese gran juego de la literatura, el escritor y el
lector tienen que encontrarse para que ese andar equilibrista de la palabra
pueda llevar a un lugar lejano, o tan cercano que nos estremezca y
conmueva. La literatura necesita de la rebeldía, ´para delatar, para
mostrar lo que no se ve, para decir… Lo indomable y la libertad están en la
lengua.
@ Eduardo Raúl Burattini
Me encantó la entrevista!!! Gracias 👏👏👏
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