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miércoles, 18 de junio de 2025

Nos preparamos para festejar este año los 160 años, de un viaje por el país de las maravillas..., sí Alicia cumple 160 años desde su primera edición.

 

Un 4 de julio de 1862, en un cálido día de verano en Inglaterra, nacía como un relato sencillo y sin búsqueda de trascendencia una historia que tomaba el nombre de una niña que iba en un bote. Sobre las tranquilas aguas del río Támesis,  el bote llevaba a bordo a un grupo de personas, tanto adultas como infantes, entre ellos sobresalía el matemático Charles Lutwidge Dodgson (mejor conocido como Lewis Carroll), su amigo el reverendo Robinson Duckworth y tres niñas curiosas y risueñas, hijas del decano de Christ Church: Lorina, Edith y la niña Alice Liddell.

Mientras el bote se deslizaba por las tranquilas aguas, el sol brillaba sobre el agua y la brisa fresca hacía más placentero el paseo, la inquieta Alice Liddell llena de curiosidad y deseos de cuentos e historias,  le pidió a Dodgson que les contara una historia. Lleno de inspiración, Dodgson (Lewis Carroll), comenzó a hilvanar palabras y frases, armando un relato que sorprendió a los presentes, en especial a esta niña Alicia,  de mirada intrigante y atrapada por las maravillas de la historia.

—Imaginen una niña llamada Alicia… que, de repente, persigue a un conejo blanco y cae en un mundo completamente al revés.

Las niñas escuchaban fascinadas mientras Dodgson narraba aventuras cada vez más extrañas: una madriguera sin fin, un gato que desaparece dejando solo su sonrisa, una Reina de Corazones que gritaba "¡Que le corten la cabeza!". Alice quedó tan encantada con la historia que, al final del paseo, le pidió que la escribiera.

Dodgson cumplió su promesa. Durante dos años trabajó en el manuscrito, dándole forma a aquella fantasía improvisada. En 1864, le entregó a Alice Liddell un libro titulado Las aventuras subterráneas de Alicia, ilustrado por él mismo. Sin embargo, sus amigos vieron en esa historia un potencial mayor y lo convencieron de publicarla.

Así, en 1865, bajo el seudónimo de Lewis Carroll, el mundo conoció Alicia en el País de las Maravillas, con ilustraciones del renombrado artista John Tenniel. Lo que comenzó como un cuento espontáneo en un paseo por el río, se convirtió en una de las obras más queridas de la literatura universal.

Curiosidades detrás del País de las Maravillas

Personajes inspirados en la vida real: Alice Liddell prestó su nombre a la protagonista, y varios personajes reflejan a personas del entorno de Dodgson.

Referencias matemáticas y filosóficas: Como matemático, Dodgson incluyó acertijos lógicos y paradojas que desafían la razón, haciendo que el libro sea mucho más que un simple cuento infantil.

Crítica a la sociedad victoriana: La Reina de Corazones representa el autoritarismo de la época, mientras que Alicia encarna la curiosidad y el deseo de independencia.

Este año: 2025, se cumplen 160 años y esa niña pedigueña de historias y relatos ha quedado plasmada para siemrpe en el famoso libro: Alicia en el País de las Maravillas, una obra que sigue cautivando a niños y adultos, con su combinación de lógica, imaginación y un toque de locura que nos recuerda que, a veces, lo imposible solo es cuestión de perspectiva. Una Alicia que no se ha conformado en ser libro e historia, además, tiene varias versiones cinematográficas, varias puestas teatrales y un sin fín de libros que buscan y rebuscan más allá de la literatura que quizo decir y mostrar Lewis Carroll con su historia y su fanatismo por esa niña de cabellos morenos que Lewis imaginó de rizos rubios y ojos asombrados.


Compartimos este texto con algunas ilustraciones de la artista argentina Alicia Carletti, una obra exquisita, especialmente sus cuadros sobre ALICIA EN EL PAÍS DE LAS MARAVILLAS donde en sus cuadros aparece siempre junto a los personajes una niña (creemos que era la propia Alicia Carletti) queriendo ser parte de cada uno de los momentos de esta clásica y bellísima historia, todo un clásico de la LIJ Universal. 

domingo, 8 de junio de 2025

Pioneras y pioneros de la literatura infantil y juvenil Argentina. Hoy recordamos la inmensa obra de BEATRIZ FERRO. (**)


 Beatriz Ferro nació en el barrio de Devoto (Buenos Aires) y falleció en la misma ciudad el jueves 12 de julio de 2012. A los 8 años hizo su primera incursión en la actividad editorial con Golondrina, una revistita casera que ella misma escribía, dibujaba, cosía y cuyo único ejemplar existente alquilaba a parientes y amigos. Desde entonces estableció un vínculo muy estrecho con la palabra escrita y la imagen que perduró durante su larga vida. Escritora, periodista, ilustradora, letrista de canciones infantiles, reconocida por los cuentos infantiles, poemas y obras de teatro de su autoría, también encaró una meritoria labor destinada a la recopilación y adaptación de cuentos populares de distintas épocas, culturas y procedencias geográficas. Sus obras, traducidas a diversos idiomas, son conocidas tanto en nuestro país como en el exterior.



En su juventud cursó arquitectura y experimentó en las artes plásticas.  Hasta que en los 60 la dibujante Agnes Lamm le presentó a Boris Spivacow y comenzó a publicar sus primeros atrevimientos literarios en la recordada colección Bolsillitos de Editorial Abril, que dirigía Boris Spivacow. Se trataba de pequeños libros ilustrados a cuatro colores, de venta masiva en los kioscos, escritos por autores que generalmente firmaban solamente con su nombre de pila: Inés (Malinow), Beatriz (Ferro), Héctor Puyol (seudónimo de Héctor Oesterheld), Nora Smolensk y Martha Giménez Pastor, entre otros. Además en Editorial Abril, Ferro escribió guiones de historieta para la revista Gatito, bajo la tutela y orientación de Oesterheld, que también escribía para esa publicación, donde a su vez había trabajos de Boris SpivacowPedro Orgambide, con dibujos de CsecsAlberto BrecciaAlberto del CastilloChacha, todos ellos autores y artistas con gran sensibilidad hacia la infancia.

Más adelante, también de la mano de Boris Spivacow desembarcó en EUDEBA donde ocupó el departamento de ediciones de libros para niños y jóvenes. Y años después siempre de la mano de Boris Spivacow formó parte del elenco estable de la prestigios editorial Centro Editor de América Latina..., un recorrido que la convirtió en una de las precursoras de la literatura infantil y juvenil no sólo de Argentina sino además de toda América Latina.



Beatriz Ferro creía que tanto el lenguaje visual como literario formaban un todo indivisible, una unidad conceptual del libro, pensado como un producto intelectual y artístico al mismo tiempo. Es por esta razón que ponía particular esmero en resaltar la calidad de las imágenes y de los textos, en la selección de autores, dibujantes, ilustradores y diseñadores gráficos. Su objetivo era ubicar a este tipo de libros en ámbitos tanto escolares como recreativos, sin dejar de lado la impronta de su espíritu innovador y didáctico.

Otra colección importante para destacar fue Cuentos de Polidoro, de 1967 y editada por el Centro Editor de América Latina. Esta obra reunía traducciones y versiones libres de cuentos clásicos de la literatura universal infantil, en donde el objetivo era acercar a los pequeños lectores a estas historias pero con un enfoque distinto y original, visible ya desde los textos, la ilustración y el diseño. Colaboraron autores e ilustradores como Inés Malinow, Horacio Clemente,  Cristina Gudiño Kieffer, Beatriz Doumerc, entre los escritores y Oski, Napoleón, Oscar Grillo y Hermenegildo Sábat, entre los ilustradores..

Esta colección dejó su huella en varias generaciones de lectores, tanto por su estilo como por la forma de comercializarse y distribuirse, de forma similar a las revistas y con sucesivas reediciones a lo largo del tiempo.

A comienzos de 1970, se encarga de redactar y dirigir la enciclopedia para niños “El Quillet de los Niños” de Editorial Arístides Quillet. En sus seis tomos se podía encontrar todo tipo de material variado e interesante para el público infantil: leyendas, juegos, curiosidades, divulgación científica y relatos históricos, todos ellos escritos en un lenguaje ágil y divertido.

De alguna manera, en sus páginas se unían el entretenimiento y la divulgación, la realidad y la fantasía.

Pero el mundo de las letras, la creación y la fantasía, pronto se acaba..., llegó la noche oscura de la DICTADURA cívico militar argentina...!!!

Desde su formación docente Beatriz Ferro publicó Repertorio de lecturas para niños y adolescentes, en colaboración con la escritora Fryda Schultz de Mantovani y la pedagoga Lydia P. de Bosch. El propósito de este libro era orientar el trabajo docente en la selección de libros para niños.

En el inicio de la dictadura militar argentina, Ferro se enfrentó con la censura que imperaba en esos años en cuanto a las publicaciones. En su libro escolar Un libro juntos. Texto de lectura para 4to. grado había expresiones y palabras tales como “trabajar en libertad”“huelga”“alpargatas”, que incomodaban a las autoridades de facto. Como Beatriz se negó a introducir los cambios propuestos por los censores, la publicación fue pronto retirada de circulación.

Los caminos de los grandes Maestros se juntan, y nacen cosas extraordinarias: BEATRIZ FERRO Y MARÍA ELENA WALSH...obras y premios


A mediados de la década del 80, Beatriz Ferro se une a la gran autora María Elena Walsh para juntas ponerse al frente de la colección “Veo y Leo”, de editorial Hyspamérica. En estos libros encontramos textos de divulgación científica y literaria y en donde también hay un cuidado especial en la ilustración y el diseño, en donde se destaca la experiencia previa de Beatriz como directora de arte.



Coordinó además otras colecciones como: “Te cuento”“Zoomundo” y “Salvemos la Tierra”, editadas por Hyspamérica, y “Los caza cosas”, de Editorial Estrada.

Con el nuevo siglo, Ferro publicó y creó nuevas colecciones de libros infantiles. Una de ellas, “¡Arriba el telón!”, recopilaba obras de teatro, ópera y ballet adaptadas a los pequeños lectores y eran publicadas por el diario “Página/12”.




También de su autoría fue la colección “Historias fantásticas de América y el mundo”, que reunía cuentos y leyendas populares, adaptados por ella misma.

Elaboró antologías, adaptando cuentos de autores renombrados como los Hermanos*Grimm (Los músicos de Bremen, El sastrecillo valiente, Hansel y Gretel, ilustrados por Agi), Perrault (El gato con botas, Caperucita Roja, Los tres deseos, ilustrados por Oscar Grillo) y H. C.*Andersen (Pulgarcita, El patito feo, La princesa y el garbanzo, ilustrados por Ayax Barnes)

Entre sus propias obras, se pueden nombrar: Cuatro cuentos cándidosVersos que no muerden (¿o sí?)Las locas ganas de imaginarAventuras de lápiz y papel, Paraguas para jugarZapatos caminadoresHistoriasextra vagantesVersos de bakelitaRadiografía de una brujaEl Usurpador de la Luna LlenEl dramático caso de las señoras igualesCuentos del topo amable, entre muchos otros.

En el año 2001 fue distinguida con el premio Pregonero de Honor por la Fundación El Libro. Y en 2008 fue candidata al Premio Hans Christian Andersen.

Pionera en el campo de la edición de libros para niños, los aportes de Ferro fueron retomados y enriquecidos posteriormente por editoriales como Sudamericana, Colihue Ediciones de la Flor y Libros del Quirquincho.

Fue Beatriz Ferro una autora con mayúsculas tanto desde lo visual como desde lo literario. Sus obras reflejan su inagotable imaginación, su preocupación por la belleza de textos y dibujos.


(**) Esta nota se ha realizado con los aportes de reportajes y notas realizadas por diferentes publicaciones y autores, algunos de ellos han quedado en la red, aunque ya no publican. Se ha utilizado notas del portal Educ.ar; Revista Imaginaria, diario Página/12, Ecured. cu entre otras. A todos aquellos que hicieron posible este homenaje a nuestra pionera: MUCHAS GRACIAS. El Hormiguero Lector.

jueves, 29 de mayo de 2025

La Zombi Marcelina..., una zombie en medio de los versos...!!!


 

La Zombi Marcelina

@ Oneida Pérez "Ofly"

 

Marcelina es una zombie

que le agrada festejar,

andar sola por las noches

y con muchos poder bailar.

 

Su ropa es toda harapos

por no lograr renovar,

pero su falda rosada

le hechiza para bailar,

¡vueltas, vueltas y vueltas

siempre, siempre al bailar!

 

Marcelina se maquilla

con el tizne del carbón

porque sólo asiste a fiestas

de miedo y terror.

 

Marcelina es una zombie

de mucho aire fiestero

y a pesar de no estar a la moda

sus pies se mueven ligero.

 

Ella baila cualquier estilo

que le toque la pianola:

pop, jazz, electrónica,

reggaetón y hasta clásica,

a pesar de la hora.

¡Marcelina por un día

descansa en santa paz!

No bailes todas las noches

o tus zapatos vas a arruinar.

 

Autora._ Oneida Pérez "Ofly"

Colección "Lacitos de Azúcar Poemas de Miel"

© Derechos Reservados

domingo, 25 de mayo de 2025

"Desde la infancia, tenemos hambre de relatos como tenemos hambre de alimento. [...] Las historias nos marcan, plasman nuestras convicciones y comportamientos, nos ayudan a entender y decir quiénes somos." Papa Francisco

 


Ciudad de Panamá, La Prensa, 24 de mayo de 2025
@Carlos Fong (*)

En sus diversos documentos y discursos, el Papa Francisco hizo alusión a los poderes de la cultura, la literatura, el arte y la narración oral. También se refirió al valor de la educación. En Veritatis Gaudium (2018) -Exhortación Apostólica- Francisco eleva una crítica a la educación puramente técnica y apela por integrar la literatura, la filosofía y la historia en la formación. La literatura, como parte de las humanidades, ayuda a desarrollar el pensamiento crítico y la sensibilidad ética, nos dice.
El discurso en la Plenaria del Pontificio Consejo de la Cultura (2017) es una reflexión sobre el diálogo entre fe, ciencia y cultura. Destacó el papel de la literatura y las humanidades en la búsqueda de sentido. Citaba constantemente algunos de sus autores favoritos: "Los grandes escritores —desde Homero hasta Dante, desde Dostoievski hasta Borges— han sabido explorar los abismos del alma humana, sus luces y sombras, su sed de infinito."
En la encíclica Laudato Si’ (2015), el Papa Francisco hace referencia a la contemplación estética y su relación con el cuidado del planeta y cómo la cultura desde la poesía, el arte y la música pueden volver a recuperar el diálogo con la naturaleza en medio del ruido: "La naturaleza está llena de palabras de amor, pero ¿cómo podremos escucharlas en medio del ruido constante?"
Sin embargo, es en el Mensaje para la 54ª Jornada Mundial de las Comunicaciones Sociales (2020) con el título: "Para que puedas contar y grabar en la memoria" donde Francisco reflexiona sobre el poder de las historias y la narración en la formación de las personas. Nos presenta un discurso con citas bíblicas y referencias literarias donde destaca cómo la literatura es un canal mediador para explorar las grandes preguntas del ser humano.
"Quiero dedicar el Mensaje de este año al tema de la narración, porque creo que para no perdernos necesitamos respirar la verdad de las buenas historias: historias que construyan, no que destruyan; historias que ayuden a reencontrar las raíces y la fuerza para avanzar juntos". Así inicia su discurso.
Más adelante dice: "Desde la infancia, tenemos hambre de relatos como tenemos hambre de alimento. [...] Las historias nos marcan, plasman nuestras convicciones y comportamientos, nos ayudan a entender y decir quiénes somos." Porque cada ser humano está hecho de historias. Somos las historias que contamos. La evolución humana no se puede entender sin las historias.
El Papa subraya que las narraciones (literatura, cine, tradición oral) no son solo entretenimiento, sino formadoras de identidad. La literatura, en este sentido, es un alimento espiritual que ayuda a dar sentido a la existencia. De allí la diferencia de las buenas y malas historias: "Cuántas historias nos narcotizan, convenciéndonos de que para ser felices necesitamos tener, poseer, consumir. [...] Pero solo las historias capaces de atravesar nuestro corazón pueden transformarnos."
Necesitamos contarnos historias para reconocernos en el otro y nosotros mismos. "En medio de la confusión de las voces (...) necesitamos una narración humana, que nos hable de nosotros y de la belleza que poseemos (...) que cuente que somos parte de un tejido vivo; que revele el entretejido de los hilos con los que estamos unidos unos con otros". Porque cuando contamos historias estamos reparando el tejido social y también las heridas personales.
Las historias están implícitas en la vida cotidiana: "El hombre es un ser narrador. Desde la infancia tenemos hambre de historias como tenemos hambre de alimentos. Ya sean en forma de cuentos, de novelas, de películas, de canciones, de noticias…, las historias influyen en nuestra vida, aunque no seamos conscientes de ello". Existe un contrato tácito entre el ser humano y las palabras. Estamos constantemente leyendo el mundo.
El título de la conferencia de Francisco viene de la Biblia, del libro de Éxodo. Cuando el Señor se le revela a Moisés y le dice: «Para que puedas contar [y grabar en la memoria] de tus hijos y nietos […] los signos que realicé en medio de ellos. Así sabréis que yo soy el Señor» (Ex 10,2). Porque para Dios el poder de la memoria es vital para que los forjadores de libertad, los líderes, luchen por la justicia. Nos dice Francisco: "De la memoria de Dios brota la liberación de la opresión, que tiene lugar a través de signos y prodigios".
Entonces , las historias son un camino seguro al conocimiento, son espejo y reflejo de nuestra existencia. "Los relatos nos enseñan; plasman nuestras convicciones y nuestros comportamientos; nos pueden ayudar a entender y a decir quiénes somos". Dice Francisco y añade: "Sumergiéndonos en las historias, podemos encontrar motivaciones heroicas para enfrentar los retos de la vida".
"El hombre será llamado así, de generación en generación, a contar y a grabar en su memoria los episodios más significativos de esta Historia de historias, los que puedan comunicar el sentido de lo sucedido". Por eso la historia de la humanidad es un gran relato que se teje en los tiempos y que le da sentido y significado, en medio del caos y el absurdo, a la vida

(*) Carlos Fong Narrador, ensayista y narrador oral panameño. Nació en la Ciudad de Panamá en 1967.

Miembro fundador del Movimiento Juvenil "Avanzada Cultural" con sede en La Chorrera y del colectivo de escritores "Umbral".

Ha sido homenajeado con algunos premios de cuentos como el José María Sánchez y el Darío Herrera, entre otros.

Ha ofrecido recitales de cuentos, poesía, y dictado conferencias, talleres y charlas didácticas sobre el libro y la animación a la lectura en escuelas, bibliotecas y comunidades.

Ha participado en importantes proyectos en torno a la animación a la lectura y el pensamiento creativo con librerías, editoriales y fundaciones culturales. Ha publicado diversos artículos en periódicos y revistas nacionales sobre la cultura, la identidad y la literatura. Aparece en cuatro antologías de literatura.

Ha organizado encuentros de cuenta-cuentos y participado en la Feria Internacional de Libro de Panamá contando cuentos de la tradición oral. Ha participado en Encuentros internacionales como: Centroamérica Cuenta Encuentro de gestores de la palabra de la región centroamericana y República Dominicana y en el Encuentro de Contadores de Historias en Buga, Colombia y en el Festival del Sur de Ecuador.

Fue miembro del equipo del proyecto El abuelo de mi abuela que coordinó la Fundación Casa Taller y la Biblioteca Nacional en el marco del Centenario de la República de Panamá.

Actualmente es el responsable de la Oficina del Plan Nacional de Lectura del Instituto Nacional de Cultura de Panamá.

Es miembro del Foro Nacional del Libro y la Lectura de Panamá y fundador y coordinador de la Red Panameña de Narradores de Historias .

Miembro de la Red Internacional de Cuentacuentos

jueves, 22 de mayo de 2025

La bruja mentirosa

 


por Adrián Ferrero


Entonces la bruja Raimunda les dijo al Rey Orlando y a la Reina Josefina en una de sus

visitas a palacio: “Tendrán tres hijas. La mayor se llamará Margo y será un búho sabio y soñador, pero con una vida como una caballera enrulada. Será melancólica pero tendrá estudios. Será una mujer letrada. Eso la volverá más retraída y vulnerable. Pero también poderosa. La segunda se llamará Bendita, y lo suyo será gozar de la vida marital y de laagricultura y los sabores. La más pequeña, Brígida, será impertinente, segura y golosa. Pero herederá la templanza de su padre.

Los reyes Orlando y Josefina quedaron perplejos. Jamás imaginaron que una bruja les podría anticipar cómo sería su familia de modo tan preciso. Jamás imaginaron que tendrían justamente tres hijas. Jamás imaginaron que su familia estaría integrada por mayoría casiabsoluta) de mujeres. Y que todas serían tan distintas. Hasta opuestas en su temperamento y sus inquietudes. Pero que fueran tres hijas era mejor que una sola porque de ese modo se podrían entretener jugando entre ellas. A la escondida. A la mencha venenosa. A la rayuela.

Y de adultas serían una buena compañía las unas para las otras. Era importante crecer juntas con amor. Y de adultas podrían sentarse a conversar alrededor de un hogar a leña sobre sus vidas. Acerca del reino. Acerca de las fiestas que darían en sus palacios.

La Reina Josefina efectivamente concibió una primera hija. Tal como lo había pronosticado la bruja, le pusieron de nombre Margo. La bruja al advertirles de su futuro, también se los había dictado. ¿Era una orden o era una profecía? ¿La bruja querría poder? ¿más del que tenía? ¿Había tenido acceso la bruja Raimunda a La Verdad? No obstante, obedientes o crédulos, comenzaron a suceder algunas cosas ciertas de lo que les había adelantado la bruja.

Dos años más tarde, la reina volvió a quedar embarazada, y tal como se los había adelantado la bruja Raimunda, le pusieron de nombre Bendita. Llegaba a este reino como una bendición. Por el momento, la premonición seguía cumpliéndose al pie de la letra.   



Y año y medio después nació Brígida. Era una bebé a la que no le costaba repartir sonrisas por todo el palacio. Hacía sonreír y conquistaba a todos con sus simpatía. A su vez hacía reír a la mucama, a la planchadora, a las costureras, a los pastores, a las bordadoras, a

las tías, al guardia del puente levadizo, al perrito de la Reina Josefina, que se llamaba Ron.

Así sería para siempre Brígida. Puro bienestar en compañía de otros. Hacía sentir a gusto a

cualquiera que llegara a palacio.

Las vidas de Margo, Bendita y Brígida, transcurrieron entre juegos, paseos y en visitas

reales a lo de sus primas. Eran tres hermanas y tenían un carácter, una educación similar a

las de las tres princesas que había pintado la bruja Raimunda en su brujería. Pero ¿las

habrían educado sus padres de ese modo para que se ajustaran sus vidas a las de una

hechicería? ¿no sería al revés, que la profecía se cumplió porque los reyes fueron

obedientes? Las tres princesas corrieron aventuras, se treparon a los árboles, hicieron

grandes partidos para jugar al crichet, organizaban fiestas para animar al reino, que era

bastante monótono en sus entretenimientos. El juego del cricket se los había enseñado su

padre. Practicaron toda su vida de niñas con este entretenimiento. Y lo compartían todo.

Desde la leche con canela que se tomaba por las tardes en palacio, las habas, el dulce de


naranjas, los dátiles, las ciruelas, las nueces y las anchoas cubiertas con perejil, tomillo y

ajo. A ellas no les gustaba el ajo. Porque les dejaba mal aliento. Por más que se cepillaran

los dientes, el olor a ajo no se iba. Y no se iba. Porque llegaba de una zona más profunda

del cuerpo. No estrictamente de la boca. Igual que las mandarinas, que después que uno las

ha comido como postre o en el desayuno, dejan un terrible olor a pulpa y gajos. Ese es el

sabor que tiene el color naranja, incluso para los pintores: a mandarinas..

Cierta vez, cuando ya eran más grandes, un novio se peleó con Margo por el aliento a

ajo que tenía. ¿Cómo iba a besar a alguien que olía tan mal, un olor que le subía desde las

tripas? No. No era una persona comprensiva. A Bendita, que era toda risas, daba largos

paseos por el lago de palacio con tres porcionees de postre de frutillas con crema, la vida no

la dejó en soledad. Pese a que rompió un novio con ella un día que apestaba a mandarinas

(que sin embargo no es un fruto maloliente, sino que huele casi casi a jugo de naranjas).

Brígida no se peleó con ningún novio. Era mandona y quería que se cumpliera su santa

voluntad. Era una líder y había salido a recorrer el reino con una escolta en su caballo

Sombra. Ella quería vivir libremente, recorrer mundo. Pero por hahora se conformaba con

conocer el reino que a cierta altura de su vida, le tocó gobernanr. A su caballo le había

puesto ese nombre porque por donde ella anduviera, el caballo la seguía. Parecía su sombra.

De ahí que su gran compañero de juegos tuviera semejante nombre tan negro y oscuro

siendo tan blanco.

El tiempo pasó. Margo no se casó, pese a que había tenido tres o cuatro pretendientes

que terminaron por salir ahuyentados frente a su cuarto de estudio, sus bibliotecas y sus

cartapacios, sus globos terráqueos y sus libros de botánica. Bendita sí se casó. Con un

Duque con castillo, cercano al de los reyes. Josefina y Orlando miraron a esa pareja con

aprobación. Bendita y el Duque fueron esposos para toda la vida. Esto se los puedo

adelantar porque soy el narrador de esta historia. Tengo el poder de adelantarme y regresar

en el tiempo de los cuentos porque soy yo quien los escribo. Hurgo en recovecos. Reviso

roperos, me acerco a la cocina mientras prreparan puercos. Espío tras las puertas. Investigo

en las hatiaciones cuando nadie duerme. En fin, un peligro. La pareja no tuvo hijos pero sí

tuvieron una casa grande con muchos animales: cuatro perros, dos canarios, cinco gatos,

una tortuga, un guacamayo y un estanque lleno de peces con colas como tules.

Brígida era temperamental. No era maleducada pero sí le gustaba tener el poder. Habían

arreglado con sus hermanas Margo y Bendita que ellas dos heredarían los campos para que

los cultivaran. Los reyes le encomendaron a Brígida que se ocupara del granero y de las

caballerizas. Porque ella disfrutaba a lo grande de recorrer el lago de palacio. Montar en

pelo a su caballo. Brígida viviría por el resto de su vida en el castillo del foso color azul

caspio. Así fue Brígida. Y le gustaba mucho comer tortas de merengue con dulce de leche.

De modo que una vez que sus padres fueron mayores, octogenarios más precisamente,

decidieron delegar el trono en sus manos. Al fin de cuentas, era la más despabilada, la más

segura, la que sabía dirigir las finanzas del reino con mano de hierro y ojos que se abrían y

cerraban a gran velocidad. Hasta cierta vez debió sofocar con su ejército un levantamiento

que había tenido lugar en el reino.Hombres que aspiraban a tener más tierras y llenar de

monedas de oro sus bolsillos se levantaron en armas. Pensaron que el hecho de que al reino

lo gobernaba una mujer, volvería más simple la victoria. Pero no conocían el brazo de

hierro de Brígida ni la carrera de su caballo Sombra. El peso de su espada y el grueso de su

escudo.

Margo llevó una vida independiente. Se mudó a un castillo igual de grande que el de sus

padres, herencia que el rey le tenía guardado en secreto. Pero sus hermanas no se quejaron


al conocer esa decisión. Los campos eran tan fértiles que grano que sembraran se

multiplicaba de un modo desmesurado. Cualquier semilla que plantaran de inmediato daba

como resultado una espiga de oro para la molienda, flores para vender en el mercado del

pueblo, perejil para las comidas, maíz para sembrar choclos o hacer polenta. ¡Y ajo! Ella

ningún pretendiente le iba a decir lo que debía comer y de qué modo hacerlo. Su menú lo

conversaba con las cocineras cada semana y se daba sus buenos atracones de rabas fritas

debidamente sazonadas.

Margo quería aprender a estudiar y leer. Y en el castillo póximo a en el que había

residido con sus padres, había en él una maestra de artes que también sabía de matemáticas,

de geografía, de historia y de literatura. Le enseñó a leer y escribir. Margo lo hizo

rápidamente, porque era inteligente, imaginativa y preguntona. Toda duda que se le

presentara, la maestra colaboraba para orientarla en sus vacilaciones o dificultades. Era una

maestra generosa.

Fue así que sus hermanas fueron princesas sin ser ilustradas ni eruditas, como ella. En

tanto Margo fue una princesa única en sus estudios y empezó a escribir historias de

caballerías. Sus hermanas en cambio andaban a caballo o remaban en el lago. Con el paso

de los años Margo se volvió sabia. Y mejoró notablemente su carácter retraído. Tuvo

muchos amigos. Le gustaban las fiestas, o tomar té de menta con tarta de damascos. Nunca

se casó. Vivió toda su vida sin saber lo que era amar profundamente a un hombre.

Y ahora la protagonista de esta historia será Margo. Lo digo yo que soy el narrador. Era

una mujer brillante. Brillaba su casa porque tenía mucamas que le hacían la cama, le

preparaban guisos de verduras, sopa de municiones con apio y cebolla. También la cebolla

era olorosa. Un aroma ácido les quedaba a las cocineras en las manos. Y tenían que ventilar

la cocina y el resto del palacio para evitar olor tan espantoso. O, peor aún, el del brócoli y el

coliflor cuando los hervían para hacerlos con salsa bechamel.

Como dije, Margo había decidido que además de ser la princesa mayor de las tres

hermanas, no quería ser ignorante sino tener día a día mayores cualidades y conocimientos.

Quería ser una mujer ilustrada. Supo que le resultaban apasionantes la Historia y la

Geografía. La Historia sobre cómo se había creado el mundo. “¿Qué es el universo?”, le

preguntó cierta vez a su maestra. Ella se quedó muda. Pero con un gesto del cuerpo,

extendió los brazos en el aire y abarcó toda la habitación. Margo tuvo una idea aproximada

de a lo que se refería su maestra. Ese gesto era una metáfora del tamaño real de la creación.

Pero se dio cuenta de que era una palabra tan difícil de explicar y entender, que buscó el

modo mediante el cual su cuerpo le permitiera definir a qué se refería con esa pregunta

complicadísima. Y si a mí, que soy el narrador alguien me hace esa pregunta, le devolvería

la pregunta, haría el mismo gesto de la maestra de Margo. Sucede que los narradores y las

princesas somos todos muy distintos. Uno habla, y escribe y escribe. Y las princesas

disfrutan de la vida. También, si son curiosas, estudian y aprenden. También hacen otras

cosas. Porque lo mejor de la vida es construir sólidos vínculos con sus amistades y

parientes. Estudiar con una maestra para gozar de más conocimientos. Y comer higos en

almíbar. Ella no iba a ser maestra. Pero quería ser una princesa conocedera de todo aquello

que la rodeara. Del planeta Tierra y de las constelaciones de estrellas. De las hojas del roble

y del tronco del cedro. Por qué los mosquitos son pequeños y pican. Y por qué los caracoles

llevan su casita encima y se meten dentro de ella ante cualquier amenaza dejando un rastro

brillante. De dónde llegan los diamantes y qué son las aguasvivas, dónde viven los

cormoranes o en qué estación del año los tulipanes florecen.


Brígida y Bendita jamás estudiaron nada. Fueron personas que vivieron en el mundo

ignorando en qué consistía y cuál era la teoría de la existencia de los dinosaurios y cómo se

habían extinguido. A Margo le resultaba una historia apasionante y pese a que en algunas

reuniones en que su hermana Brígida convocaba a tomar un té, hizo el intento de contarles

la teoría del Big Bang.

Margo, con su cabecita llena de saberes, colaboró con Brigida para gobernar el reino.

Fue su asesora de palacio. Margo no era envidiosa ni tampoco competitiva ni malvada.

Menos aún cobarde. Era bondadosa pero también cuando se enojaba (siempre por un

motivo que lo ameritaba, era capaz de echar de palacio al rufián que había venido a robar o

molestar de una patada en el culo cuando los guardias no estaban presentes.

Brigita le enseñó a Margo, eso sí, cómo hacer huevos fritos. Y le mandó dos docenas de

huevos cada quince días gracias a las gallinas ponedoras de palacio Y luego una sartén

especial para freírlos, no sin antes haber hecho uno delante de su hermana. “¿Ves que es

muy fácil?. Ahora freí uno vos misma como prueba”. De ese modo Margo aprendió

riquísimas recetas que cocinaba. Desde mediaunas, flan de claras, budines de manzana con

caramelo, roscas de Pascua.Y sabía hacer dulce de frutas. El de higo era su favorito..

Bendita y su esposo, vivieron siempre en la soledad de su castillo. No se interesaron por

nada del mundo en estudiar, en aprender, sino en comer, comer y comer. En esa casa todos

fueron obesos. Y ese sobrepeso hizo que muchas personas se rieran de ellos. Pero no les

importó. Se tenían a sí mismos para disfrutar semejante compañía agradable.

Brigita siguió siendo asesorada por Margo. Pese a estar casada, su esposo vivía en las

tabernas, de juerga, lejos de palacio. Llegaba solamente para dormir y comer en el

almuerzo, al día siguiente. Ni siquiera se levantaba para desayunar. Dormía hasta el

mediodía porque se acostaba muy tarde por la madrugaba.

Margo comenzó a viajar largamente por el mundo. Para empezar fue a Chipre y a

Turquía. Conoció países extraordinarios. Ríos con una cascada de la que tomar agua y

bañarse cuando no había nadie a la vista. Y también tuvo amigos en abundancia en otros

países. Incluso en los cuales se hablaran otros idiomas.

Aprendió inglés, francés, italiano y chino mandarín. A la larga o a la corta, se

entendían. Las hermanas no se pelearon jamás. Reinó la armonía por siempre jamás. Solo

que comenzó a distanciarlas el temperamente de cada una.

Brígida vivió para gobernar su castillo. Para dar órdenes claras a los sirvientes de

palacio. Se casó engañada. Lo cierto es que se vio en la situación de tener que soportar a un

bueno para nada. Debía recibirlo borracho al regresar de sus juergas o de apostar a las

carreras de caballos. A las riñas de gallos. Prácticamente desplumó a Brígida. Hasta que su

hermana Margo, inteligente como era y tan cariñosa siempre, le explicó que no podía seguir

conviviendo con un holgazán. Un bueno para nada. La dejaría en la ruina.

Brígida un día que se quedó despierta hasta tarde y cuando él llegó, le dijo que era un

inútil. Lo desterró de su reino y de su palacio. Ella no iba a vivir con atorrantes que no

trabajaban ni tampoco se ocupaban de cuidar de su amor.

Bendita vivió en su castillo a solas con su esposo hasta que fueron viejos. Brígida no se

volvió a casar jamás. Le bastaba con dedicarse todo el tiempo a gobernar el reino. Y

supervisar a quienes se ocupaban de las gallinas, los caballos, los chivos y las ovejas para

tejer con su mullida lana abrigos suaves para el invierno. Era lo mejor del mundo la

libertad.

Y Margo no solo era inteligente y culta. Una mujer preparada para digitar los rumbos de

su propio castillo. Ayudar a sus amigos en problemas. Y compartir la vida con toda esa


gente maravillosa como eran las damas de compañía de palacio. Jugaba al cricket y leía.

Conversaba con las costureras y las planchadoras, de donde de aprende mucho, dicho sea

de paso.

Los reyes no alcanzaron a ver toda esta historia completa. Fallecieron muchos años

antes. Pero en lo esencial los presagios y los vaticinios de la bruja Raimunda se cumplieron

porque todo fue en ese reino involuntario (las cosas ocurrieron solas, la vida discurrió sin

planes, las relaciones simplemente acontecieron), pero también deliberado (fue producto

del Plan que había trazado la bruja o alguien más poderoso). La bruja como tenía poderes

no murió sino que cierta vez asustó a un hombre con sus premoniciones. Cenaba

murciélagos, cucarachas, culebras, sapos y cienpiés. Y fueron las tres hermanas las que

decidieron echar a la bruja del reino. Distante de ese reino lleno de amor y princesas

buenas. La bruja supieron que en primer lugar gozaba de reírse de los demás (empezamos

mal), con una sonrisa como una media luna, socarrona. Las premoniciones de la bruja se

volvieron tenebrosas. Y todos estuvieron de acuerdo en expulsarla del reino. Aquí termina

esta historia. Pero las vidas de Margo, Bendita y Brígida continuaron hasta que fueron

viejitas y arrugadas como una uva pasa. Y comenzaron a juntarse con sus hermanas cada

miércoles por la noche para cenar y hablar de los avatares del reino. De su pasado. De sus

padres. De los campos que habían cultivado. Y de la soledad que rondaba a Margo y

Brígida. Pero ellas dos fueron también grandes confidentes. Y no hubo secretos en esos dos

castillos ni nada para esconder. Es que cuando uno dice la verdad la vida comienza a tener

mayor sentido. Las tres princesas que no habían nacido debido a las profecías de la bruja.

Sino porque el destino así lo había despuesto. Sus padres le habían creído sus embustes a la

Bruja y sus predicciones. Pero ella hacía una profecía para que luego fuera imitada por los

desprevenidos que la habían consultado. La bruja cayó en descrédito. Nadie nunca más

decidió solicitar sus poderes. Hasta que a estos castillos y a estas princesas, las llegaron a

visitar las hadas. Hadas que les enseñaron que la magia debe ser usada para hacer el bien.

Porque de otro modo, es causa de estragos, mentiras y hasta tragedias. Las hadas velaron

por ese reino. Y el mundo fue más diáfano. Por los ventanales de palacio entró más luz, el

aroma de las fresias fue más intenso. Y las tres hermanas supieron que mentir no deja

dormir en paz. Y que en lugar de mentir, comenzaron a hacerles a las hadas promesas que

efectivamente siempre cumplieron. El palacio de Brígida se llenó en algunas noches de luna

llena, de un polvillo blanco, todo oro y plata.

sábado, 17 de mayo de 2025

La 49na Feria del Libro de Buenos Aires llegó a su fin



 La 49° Feria Internacional del Libro de Buenos Aires en números Más de un millón de visitantes recorrieron los más de 42 mil m2 de exposición durante los 19 días de la 49.ª Feria Internacional del Libro de Buenos Aires. Esta convocatoria multitudinaria evidencia que la Feria continúa siendo el gran acontecimiento cultural de América Latina y que sus pasillos, propuestas y actividades han estado colmadas de público de todas las edades.

 La Fundación El Libro, organizadora de la Feria Internacional de Buenos Aires, da a conocer las cifras de cierre de una edición que culmina con números altamente positivos. Aquí, los números del 2025: ✓ Aumento del 10% de público con respecto a 2024. ✓ 42.710 m2 de exposición ✓ 14736 m2 de stands ✓ 346 stands ✓ 465 expositores, locales e internacionales. ✓ 1.417 sellos editoriales ✓ 9 Pabellones (Ocre, Azul, Verde, Amarillo, Rojo, Blanco, Central, 8 y 9) ✓ 12 salas para eventos ✓ 11 auditorios semiabiertos: Zona Infantil Javier Villafañe (Biblioteca, Cuentacuentos, Taller), Zona Futuro, Zona Explora, Espacio Digital, Espacio Diversidad Funcional y Discapacidad, Orgullo y Prejuicio, Firmódromo, Zona Streaming y Tribuna Joven. ✓ 24 países y colectividades presentes: Riyadh – Saudi Arabia; Xunta de Galicia, Paraguay, Ucrania, Brasil, Perú, Armenia, Italia- Istituto Italiano di Cultura, Uruguay, España y Unión Europea (que reúne a Alemania, Austria, Bélgica, Bulgaria, Chequia, Chipre, Croacia, Eslovenia, Francia, Finlandia, Irlanda, Portugal y Polonia, además de España e Italia que contaron con sus propios stands), ✓ 20 provincias presentes: Buenos Aires, Catamarca, Chaco, Chubut, Córdoba, Entre Ríos, Jujuy, La Pampa, Mendoza, Neuquén, Río Negro, Salta, San Juan, San Luis, Santa Cruz, Santa Fe, Santiago del Estero, Tierra del Fuego, Antártida e Islas del Atlántico Sur y Tucumán. También participó la Ciudad Autónoma de Buenos Aires ✓ 12 editoriales participaron del Nuevo Barrio ✓ 172 expositores estuvieron adheridos al programa Libro% de la CONABIP ✓ 1008 bibliotecas (940 con subsidio) participaron del programa Libro% de la CONABIP 



Jornadas Profesionales ✓ Acudieron a la Feria 14.730 profesionales del libro (editores, libreros, distribuidores, ilustradores, traductores, entre otros) provenientes de más de 25 países. Es un 10% más que en 2024. ✓ El Programa Librero Amigo contó con la adhesión de 118 expositores ✓

El Programa Bibliotecario Amigo contó con la adhesión de más de 113 expositores ✓ Logística nacional: se despacharon 28.900 kilos a más de 350 librerías de 160 ciudades de todas las provincias del país. 32% más que en 2024. ✓ Logística Internacional: se despacharon más de 5.300 kilos a 200 librerías de Latinoamérica, España y los Estados Unidos. 40% menos que en 2024.



Programación cultural y para docentes ✓ 674 actos culturales en salas ✓ 657 actos culturales en espacios de la Fundación El Libro ✓ 18 actos en salas organizados por Riyadh, Ciudad Invitada de Honor de esta edición ✓ 4789 firmas registradas (correspondientes a 4.110 autores, en stands de 122 expositores) ✓ 18 firmas (las más convocantes), de 7 expositores en el Firmódromo ✓ 1.025 docentes participaron de las tres actividades educativas y en Zona Docente ✓ 370 narradores participaron en el Encuentro de Narración Oral ✓ 31.895 estudiantes junto con 3.434 acompañantes docentes de 788 establecimientos

Medios y Redes Sociales ✓ 2.158 periodistas acreditados en sala ✓ 337 bookfluencers acreditados en sala ✓ 330.600 seguidores en Facebook ✓ 233.500 seguidores en Instagram ✓ 77.190 seguidores en X


Felicitaciones...!!! Hasta el año que viene...!!!

sábado, 10 de mayo de 2025

Comunicado de Prensa Mayo/2025


 COMUNICADO DE PRENSA   MAYO/2025 


El Comite del Premio Nacional y Latinoamericano de literatura infantil y juvenil LA HORMIGUITA VIAJERA, ha decidido en forma unánime otorgar el PREMIO LA HORMIGUITA VIAJERA en la Edición 2025, en grado de HONOR a la Serie El Eternauta obra creada oportunamente por Germán Oesterheld y el dibujante Francisco Solano López y que en este año ha sido recreada magistralmente por el Director Bruno Stagnaro, con un guión de excelencia, con un elenco maraviloso y altamente profesional, con una producción comprometida y con el liderazgo de una plataforma como Netflix. A todos ellos y a la memoria de Germán Oesterheld va este reconocimiento nacido desde una Biblioteca Popular, que sabe que sólo el trabajo colectivo pueda dar buen fruto, que no hay salvación posible desde lo individual, que dicha salvación solos e consigue tomando de la mano al otro y avanzando en conjunto. Con un sentimiento de orgullo nacional, es que otorgamos la distinción a todo este equipo de trabajo profesional, que han logrado plasmar una verdadera obra de arte. FELICITACIONES Y GRACIAS.


Comité del Premio Nacional y Latinoamericano de LIJ: La Hormiguita Viajera.

Biblioteca Popular Madre Teresa de Virrey del Pino, La Matanza, BUENOS AIRES, ARGENTINA.

Mayo/2025

#ElEternauta #eleternautanetflix #brunostagnaro #Darin #RicardoDarin

sábado, 3 de mayo de 2025

Pioneras y pioneros de la literatura infantil y juvenil argentina. Hoy traemos al Hormiguero Lector el recuerdo y la erudicción de Dora Pastoriza de Etchebarne

 


Hoy día cuando vemos la cantidad y la excelsa calidad de cuenta cuentos, narradores orales y decidores, vemos que su siembra de años, sus estudios y enseñanzas, como las semillas del Evangelio han caído en tierra fértil..., vaya nuestro recuerdo de GRATITUD...!!!


Dora Pastoriza de Etchebarne, nació el 16/08/1917. Jurado Premios Konex 1994. Profesora de Enseñanza Media, Normal y Especial en Letras recibida en la Facultad de Filosofía y Letras (Universidad Nacional de Buenos Aires, 1948). Licenciada en Letras con Especialización en Literatura Iberoamericana (UBA 1954) y Doctora en Filosofía y Letras (UBA, 1955). De larga trayectoria como docente y escritora. Rectora del Instituto Summa (1980). Presidenta de la Fundación Salottiana y Directora del Club de Narradores. Presidió el gabinete de Investigaciones de Literatura Infantil-Juvenil del Instituto Summa y fue Directora de las colecciones de cuentos El MiradorEl Balcón y La Ventanita de la Editorial Guadalupe. Recibió los premios Faja de Honor (Sociedad Argentina de Escritores) y Premio Chaman (Centro Latinoamericano de Creación e Investigación Teatral, Caracas, Venezuela), entre otras distinciones. Falleció el 12/11/2000, se cumplen este año 25 años de su paso a la posteridad, dejando una obra y una enseñanza que todavía hoy sigue dando sus frutos en lectores, docentes, bibliotecarios y escritores de Argentina y el mundo.



Dora Pastoriza de Etchebarne, El arte de narrar. Un oficio olvidado, ed. Guadalupe, Buenos Aires, 1972.

“Este libro es un intento de rescatar del olvido la vieja costumbre de contar cuentos a los niños.

Para ello, busca hacer sentir el valor de la narración como caja de resonancia  telúricas que prolonga la infancia de los hombres —la enriquece y embellece— estableciendo entre ellos un vínculo de misteriosa comunicación.

Sólo quien haya ejercido este viejo menester, quien haya visto los rostros transfigurados de los oyentes —niños y adultos—, y haya sentido vibrar de emoción sus corazones ante el impacto del “Había una vez…”, puede dar fe de lo que este acto mínimo de confraternidad, tiene de esencial y profundo..." 

Dora Etchebarne es considerada pionera en el arte de la narración oral y maestra indiscutible de narradores. 

Este libro causó revuelo, consideren el año de edición,  en docentes y no docentes por defender la palabra oral en todos los ámbitos formales y no formales. Era inimaginable… y fue atacado por  un planteo semejante.

¿Cómo contar/narrar un cuento sin la utilización de imágenes? ¿Cómo sólo la voz humana, la voz del narrador, es la única encargada de establecer ese vínculo afectivo, de brindar imágenes nuevas? No la imagen masificada, la misma para todos, sino aquella que  crece según nuestras necesidades espirituales. 

Con el tiempo el enfoque fue teniendo éxito en Argentina y en otros lugares del mundo por aquellos que defendían el valor de la  palabra oral.

Dora era Doctora en Letras, su tesis fue sobre “El cuento en la Literatura infantil “. Editada por Editorial Kapelusz. La Literatura Infantil la unió a otra extraordinaria mujer, visionaria educadora que decía, “Hay que resucitar al narrador”. En esto veía la relación con la Literatura Infantil. 

Esto produjo en Dora un verdadero impacto y como ella expresó: “mezcla de asombro y de curiosidad, de temor y de entusiasmo. Se nos pedía no sólo la enseñanza de un oficio olvidado sino, además, el ejercicio de ese arte menor al que la sociedad contemporánea, hija de la civilización de la imprenta, parecería haber acallado para siempre”

Comenzó a formar narradores, a dar cursos a padres y docentes, y a ejercer este mismo oficio en escuelas, hospitales, bibliotecas, cárceles, plazas, geriátricos, congresos. Creó para esto el Club de Narradores. 

El viejo mester de juglaría cobraba nueva vida, cada narrador era a su manera, una réplica moderna de aquel juglar medieval.

Dora dice en El arte de narrar, en Palabra y comunicación (pag.10)

“…Se necesita ante todo, establecer comunicación entre el narrador y su público, algo así como una corriente vivificante que llega a través de la emoción. Y es la voz humana, la voz del narrador, el  artífice insustituible de imágenes, de imágenes verbales a las que un estado de creencia, es decir la adhesión fundada en las condiciones puramente subjetivas, les confiere validez objetiva.

Recuérdese que de la fuerza persuasiva del narrador dependerá en gran parte la actitud de creencia del oyente (...) De allí la importancia de que la palabra, considerada en el caso de la narración como único estímulo de la imaginación creadora, se vea reforzada por el gesto y los modos no verbales del habla, de cuyo acertado empleo dependerá la riqueza expresiva del relato”

“… mediante la palabra , como si la apoyara en el aire, irá “dibujando” su cuento. Pero cada oyente lo verá a su manera según lo imparten las secuencias del relato…”

Y en el epígrafe dedicado a la Comunicación — Soledad (pag. 14)

“… creemos firmemente en la posibilidad de recuperar la costumbre antiquísima de contar cuentos, otra vez, como quien retoma el hilo de los tiempos, y continúa un rito ancestral. Con nuestro trabajo queremos favorecer  ese reencuentro. Apoyados en una larga experiencia, exponemos el aspecto práctico que entraña la narración considerada como un camino insospechado de comunicación afectiva, que permite vehiculizar enseñanzas, estrechar vínculos y encauzar sentimientos, afianzando en el niño la capacidad de escuchar, antesala del pensar” 

En el libro encontramos los siguientes capítulos:

  • Valoración de la palabra:       
    • Imagen e imaginario
    • Palabra y comunicación
    • Valor de la imagen propia
    • Comunicación y soledad
    • Terapéutica de la palabra
  • Referencias Históricas
  • Didáctica de la Narración:
    • Ejercicios previos
    • Condiciones del cuento a narrar
    • Recreación del cuento (lit y folk)
    • El momento de narrar
    • Ubicación—voz—gesto—ademán
    • La narración en diferentes ámbitos
  • Proyección de la Narración.

Dora Etchebarne, recordemos que este libro fue publicado en el año 1972 (hace 43 años), revolucionó, como se observa en el resumido planteo del marco teórico, la relación del adulto con la literatura infantil, con el uso de la palabra, con favorecer la imaginación creadora, con  el acercamiento al libro, y con la formación de lectores reflexivos y críticos.

El arte de narrar se constituyó en bibliografía de consulta importante para todos los que nos acercamos al arte de narrar: narradores orales, autores de otros abordajes teóricos sobre narración, que felizmente ya hay, pero no podemos ni debemos dejar de valorar que fuera pionera en este oficio no tan olvidado .



Importa valorar a los que nos marcaron este camino, los que nos dejaron huellas en este arte de narrar.

En su libro Valoración  de la palabra Dora Etchebarne cita a Gastón Bachelard, quien resumiría todo este encuadre.

“… la imagen de la imaginación no está sometida a una comprobación de la realidad…”

“… no queremos un niño liberado de la imagen, sino libre en relación a la imagen …” (*)







(*)
extracto del artículo:   El arte de narrar. Un oficio olvidado, 
de la Lic. Carmen Bártolo Profesora en Letras con Especialización en Literatura Infantil- Juvenil  Especialista en Narración Oral


 



Nos preparamos para festejar este año los 160 años, de un viaje por el país de las maravillas..., sí Alicia cumple 160 años desde su primera edición.

  Un 4 de julio de 1862, en un cálido día de verano en Inglaterra, nacía como un relato sencillo y sin búsqueda de trascendencia una histori...